Olivier et Yanina.

Éste pasado diciembre se casó mi amiga Yanina. A Yanina tuve el gran gusto de conocerla en nuestro corto pero intenso postgrado de Dirección de Arte en Barcelona. Fué muy divertido mientras duró. Ella es de esa gente increíble con la que conectas en seguida y que sabes, en lo más profundo de tu ser, volverás a ver o a coincidir, alguna vez en la vida (o por lo menos te gustaría que así fuera). Y con ella así fué. Cuando nuestros planes de venirnos al D.F. tomaron forma de billetes y maletas, le conté muy emocionada que me venía a vivir a su México lindo y querido :D

La novia.

Yanina se nos fue antes de Barcelona, por amor. Contra todas nuestras intenciones de convencerla de lo contrario y de hacerle ver la oportunidad inmensa que se iba a perder, se acabó llendo de todas formas. Y aunque la historia es más larga, la acorto diciendo que me alegra que hayamos sido tan poco persuasivas y tan malas en nuestra misión.

Yanina, se casó con Olivier éste pasado diciembre.

Olie, es un francés, ya más mexicano que otra cosa, que hasta alburea. Además de muy simpático, una grandísima persona también. Es un éxito cuando la gente linda y buena se encuentra. Y aunque somos poco de bodas, la verdad, esta nos hacía mucha ilusión.

El novio y el padre del novio.

Días antes, le regalé a Nicko una cámara Polaroid, como regalo adelantadísimo de Navidad (siempre hago lo mismo). Es mejor fotógrafo que muchos con la profesión (y que yo, sin duda) y me pareció buena idea dársela antes de la boda. Así que un día desayunando, se nos ocurrió hacer de fotógrafos improvisados y alternativos de su boda y, como quién no quiere la cosa, retratar nuestra visión de la misma.

No sería justo decir que todo el trabajo fue nuestro, ya que la boda estuvo linda de principio a fin. No faltó un solo detalle. Yanina, entre todo el estrés que ya tenía encima y, como si le sobrara el tiempo, hasta nos regaló a cada dama, un clutch del mismo tono del vestido (que coció ella), con una foto dentro, de algún momento que vivió con cada una de nosotras. Tampoco podría pasar por alto la sorpresa de los papás de Olie, cuando antes del banquete, salieron al escenario a bailar tango, con traje de luces y haciendo unas piruetas que yo, ni en mi estado más fit de la vida, podría llegar a hacer.

En fín. Que nuestro momento-boda-yanina-y-olivier, quedó retratado en este tumblr, al que titulamos Olivier et Yanina y en el que intentamos contar un poco cómo lo vivimos y como agradecimiento por permitirnos estar en un momento tan inolvidable de sus vidas. Aunque entre ellos y nosotros, sabemos que en realidad fuimos contratados, únicamente como extras, para sus fotos de boda ;)

¡Los queremos chicos!.

Caro & Nicko.